Y no olvidar que Aitana dejaba el trabajo de animadora para volver a los cruceros a bailar, me dolió mucho que se fuera pero si eso era lo que ella quería….hicimos su despedida a lo grande, a nuestra manera.
Jenny estaba siendo muy cruel conmigo, explicando toda mi vida a la gente que no me conocía, diciendo que era una puta y una mentirosa, que no podía ser que yo viajara de Italia a Uruguay cada semana, solo porque ella no lo podía hacer. Poniendo en peligro y cuestionando mi autoridad como Jefa de Animación a todas las chicas de prácticas que yo tenía.
Aquella noche salimos y fuimos primero a la playa a beber, sentados en la arena en cadena, haciéndonos masajes borrachos en la cabeza, riéndonos a carcajada limpia.
Yo sentía las manos de Phillip en mi cabeza como algo especial que me estaba empapando el alma de felicidad, pero él no me gustaba nada de nada.
Cada vez estábamos más pegados y más alejados del grupo como si aquella aurea nos hubiera transportado a otro mundo, su aliento en mi oído, sus labios rozando mi cuello, una sensación que bajaba como un río desbocado por todo mi cuerpo.
No sentía que era el momento de empezar nada con nadie pero aquella noche cambió algo.
Nos sentábamos todos juntos cuando íbamos de fiesta, simplemente porque trabajábamos juntos, Jenny no sabía que Sion me lo había contado todo, y me costaba mucho aguantarme para no arrancarle la cabeza.
Su mirada era baja, como de culpabilidad, entonces yo le pregunté si podíamos salir a hablar fuera, su cara de sorpresa... se levantó y salimos fuera.
Se lo pregunté, le dije si se había acostado con Rodri sabiendo que a mi me gustaba y aunque no estuviera con él, hay un código de amistad que si alguna vez rompí con alguien nunca lo volvería hacer, sé lo que se siente cuando te comes las babas de tu amiga.
Loca de rabia, chillando en una calle a reventar de gente, que como podía pensar eso de ella, que yo era su amiga, que él se había insinuado pero que ella no quiso... incluso Beth, la chica de Londres de la recepción, me dijo que eso no era verdad, se enfadaron tanto conmigo! Pero tanto!
Al final le pedí perdón porque me sentía mal, que pasa si Sion me había mentido?
.
Insistieron mucho en quien me había dicho que Rodri y Jenny se habían acostado, yo me calle por lealtad a Sion, y por eso tuve que aguantar que me llamaran puta, mentirosa, bueno un poco de todo...
… y al fondo de la multitud bailante se abrió como una luz de esas de escenario, redonda, pequeña y blanca que se va moviendo para iluminar al protagonista, en esta caso protagonistas, Jenny y Rodri dándose un beso en la boca insostenido por las carcajadas y sus ojos torneados mirándome, me dolió, aun así Phillip me estaba curando de todo aquello, no sabía como pero lo estaba haciendo.
Giré mi cara hacia otro lado pensando que Jenny ya no tenía credibilidad alguna conmigo, hacía pocas horas me había dicho que no había nada entre ellos y ahora se estaban besando…
La ira se apoderó de mi, hacía dos días que iba con muletas, me había torcido el pie, salí de la discoteca como una furia, Aitana detrás de mí, esquivando a la gente, estaba todo borroso, cuando el aire tocó mi cara, mi muleta salió disparada contra el cristal de un local de enfrente….
Menos mal que Aitana y Dana salieron detrás de mí y me tranquilizaron, lo juro que aquella noche podría haber matado a alguien, mis piernas temblaban, mi respiración estaba tan acelerada que era incapaz de articular palabra, todo el mundo mirando….
Un desastre.
Al ratito después de pedirle perdón al negrito que vigilaba el local, por suerte la muleta no rompió nada….Volvimos a entrar, tuvimos problemas para que me dejaran entrar pero dijimos que era mi cumpleaños y pasamos.
Allí estaba Mariella! Una chica muy guapa, de talla ancha, muy simpática también victima de Jenny y su ejército de lobas.
Phillip preguntó que había pasado pero yo no le dije la verdad, él no sabía nada de Uruguay e Italia, ni quería que lo supiera, por si acaso.
Phillip, Mariella y yo habíamos salido varias veces a comer por ahí.
Había sofás en la discoteca con mesas en medio, yo estaba tumbada en la barriga de Phillip mientras el me hacía cosquillas en la barriga y esas tonterías que se hacen cuando tonteas, valga la redundancia, con alguien.
De repente todo cambió otra vez, otro cambio de canal, de dimensión, otro foco de escenario todavía más grande y más blanco!!!
Phillip y Mariella se estaban besando, era tan indescriptible la sensación que no sabría como explicarlo… era como si alguien te da una paliza y de repente todo el mundo se anima a pegarte sin cesar, quería desaparecer…
Cuando acabaron la faena, se volvieron a sentar a mi lado, yo no les quería escuchar!
Y entonces sonó el “call of duty”:..
-Argia , nos dejas tu casa?.. Mi “no” fue bastante profundo y directo, mis ojos estaban en rojo vivo, quise chillar, llorar, golpear a todo el que se me pusiera delante, lástima que al final de la noche me había calmado de todo aquel desastre de vida sentimental con un par de copas de más, estaba borracha, no tenía otra salida , y al final accedí a dejarles mi sofá cama, y así fue, les tiré un condón en la cara y les pedí por favor que no hicieran ruido, ella me miraba con ojos redondos y verdes haciéndome un “no” con la cabeza, que era un sí, me dio igual, porque el fondo ella había sido más rápida y lista que yo, le gustaba Phillip y a fue a por ello, mientras yo rompía mi rabia a golpes contra un cristal.
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